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Tras la lectura del libro “1000 sitios que ver antes de morir” de Patricia Schultz, se propuso como reto intentar conseguir visitar y conocer la mayoría de ellos y desde entonces cuenta sus viajes por el mundo en “El viaje de mi vida”.
Sandra Candal comenzó a viajar sola y ahora dice sentirse más libre que nunca para seguir con la locura de conocer el mundo. Sandra podría describirse como una “nómada digital” que compagina su trabajo de traductora con compartir su pasión por los viajes a través de su blog.
1. ¿De dónde te viene el “gusanillo viajero”?
Soy hija de emigrantes así que se puede decir que “nací viajando”. Mi padre es gallego, mi madre salmantina y se conocieron en París (Francia). Mi hermana y yo nacimos allí. Regresamos a España cuando yo ya tenía 15 años.
Por otro lado, los idiomas siempre se me dieron bien así que tan pronto tuve la oportunidad de hacer intercambios en el cole (con 12 años), mi familia me animó a ir a practicar inglés a Irlanda y Reino Unido.
Luego llegaron los viajes con amigos, con mi pareja… y finalmente, cuando nadie pudo acompañarme, me lancé a viajar sola.
2. ¿Cómo sueles organizar un viaje?
¡Durante estos últimos años, mi forma de organizar los viajes ha cambiado radicalmente!
Cuando trabajaba por cuenta ajena, como mis días de vacaciones eran contados, planificaba hasta el último segundo. Tras mi excedencia voluntaria de cuatro meses en 2016, por fin, pude viajar más despacio, a mi ritmo, y fue toda una revelación. A mi regreso, me di cuenta de que quería seguir viajando y viviendo así.
Empecé a trabajar por mi cuenta hace 3 años y a teletrabajar (soy traductora) hace ahora un año para poder quedarme más tiempo en los sitios… Así que ahora cuando viajo, voy planificando las cosas día a día, según lo que me pida el cuerpo y el trabajo que vaya teniendo…
3. ¿Qué destino te ha marcado más y por qué?
Siempre digo que India fue un punto de inflexión porque fue mi primer viaje fuera de Europa… ¡Y fue como un jarro de agua fría!
Japón, Cuba y Galápagos también me dejaron loca… Eran sueños viajeros y me emocionó mucho poder cumplirlos.
De hecho, estos cuatro países los llevo tatuados en mi piel a modo de souvenirs. ¡Lo de los imanes en la nevera ya está muy visto!
4. ¿Existe algún lugar al que evitarías volver?
Por ahora no hay ninguno, pero sí que es cierto que Marruecos fue un país que tenía bastante idealizado y que me decepcionó… También tengo en mi lista de “países pendientes con los que hacer las paces” a Tailandia.
Malasia y Birmania me fascinaron tanto que Tailandia me pareció muy edulcorada, occidentalizada y demasiado turística…
5. ¿Cuál ha sido el mayor temor al que te has enfrentado durante tus viajes?
Tras 10 años viajando sola, me considero una suertuda, pero también considero que suelo tener bastante instinto y soy muy precavida. No suelo arriesgarme y siempre viajo con seguro.
Para mí, lo primordial es centrarse en qué estás haciendo en cada momento (no andar de despistado por la vida), fijarte en por dónde te mueves, qué te rodea…
A día de hoy, sólo me he llevado dos sustos y finalmente no llegó a pasar nada porque considero que fui capaz de reaccionar a tiempo.
6. ¿Conoces ya tu próximo destino?
¿Puede que Birmania? Ya estuve en Birmania y ahora mismo no creo que vuelva, jajaja
Ahora que soy nómada digital, no elijo especialmente ningún destino. Viajo en función del trabajo que tenga, de lo que me apetece en ese momento, de las ofertas.
7. Cosas imprescindibles en tu mochila
¡No uso mochila sino siempre maleta de mano!
Viajo ligera, pero soy tan maniática con el orden que necesito verlo todo colocado y visualizar fácilmente todo lo que tengo en ella.
¿Imprescindibles? Siempre llevo calzado variado (soy de mucho caminar y siempre voy con miedo de que algún zapato me haga daño), el portátil (mi oficina) y el móvil, como no.
8. ¿Qué consejos darías a las personas que desean viajar?
Que no piensen en viajar como si fuera una moda o coleccionar fotos de Instagram. Tanto postureo hace que ya no se disfruten de las cosas. A veces alucino la de tiempo que la gente pierde en intentar sacar la “pose perfecta” mientras no se fijan en lo que les rodea.
Que prueben, al menos una vez, a viajar solos para sumergirse de verdad en un viaje y poder así interactuar más con los locales.
Que no se crean que hay viajes o destinos mejores o peores.
El mejor viaje es aquel que a ti más te guste, sea al lado de tu casa o muy lejos.
Lo importante es tener esa experiencia, vivir y disfrutar del momento.
9. ¿Sueles viajar solo o acompañado?
En los 10 últimos años he viajado mayoritariamente sola, pero algún viaje sí he hecho con la familia, amigos o pareja.
10. Por tu experiencia, ¿se puede viajar sin mucho presupuesto?
En los últimos años parece una obsesión el viajar sin presupuesto. Esa forma de viajar no va conmigo. No necesito grandes lujos, pero tampoco quiero privarme de cosas que me apetece hacer.
Por eso, en mi blog siempre publico presupuestos de un “turista medio” porque considero que sí hay cosas por las que se debería pagar básicamente para contribuir en la economía local o incluso para conservar el patrimonio.
No hay necesidad de derrochar, pero ir racaneando en países que tienen un nivel adquisitivo inferior al mío, me parece muy cutre…
11. ¿Sigues o admiras a algún otro viajero o blog de viajes?
Llevo ahora 8 años con mi blog, El Viaje de mi Vida, y evidentemente no soy ajena al mundo blogueril. Sin embargo, me mantengo cada día más apartada de él ya que considero que, en los últimos años, la “profesión”, al igual que el periodismo, ha ido degenerando hacia cosas que no me gustan nada, que no comparto…
Afortunadamente, gracias a las redes sociales, sí he conocido a gente maravillosa y con la que ahora tengo la suerte de poder trabajar, colaboradoras del blog, como Cristina E. Lozano, Paula Carrillo o Angie D’Enrico.
12. ¿A qué te dedicas tu tiempo cuando no estás viajando?
Pues que ahora mismo, vivo viajando. Trabajo como traductora online y escribo en mi blog desde mi base de operaciones, A Coruña, ¡O desde cualquier lugar del mundo!
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